3/1/11

Debra Paget

La exótica de ojos esmeralda

Debra Paget llegó al cine empujada por una madre cuyo sueño era que su preciosa niña llegara a ser una gran estrella del cine. Ella nunca pareció estar demasiado interesada en el mundillo artístico y su meta frustrada fue ser una vulgar ama de casa con un hogar y un marido al que cuidar.
  • Al final lo consiguió. Pero para entonces ya había logrado complacer a mamá triunfando a lo grande como artista. Su carrera duraría unos quince años, poco tiempo, pero fue ella la que decidió dejarlo.
  • Justo con esa edad, quince años, la mamá de la futura artista consiguió que la niña accediera presentarse a un concurso de caras nuevas auspiciado por la Twenty Century Fox. Concurso que, por supuesto, ganó sin dificultad.
  • Nada extraño, pues la belleza de Debra Paget puede considerarse legendaria y, aunque no circulen demasiadas fotos de cuando era niña, bastan las de sus primeras películas, en la que todavía quedaban vestigios de una infancia prematuramente cercenada por la impaciencia materna de contar con una hija que saliera en el cine.
  • Nacida en Denver en 1933, Debra Paget debuta en la pantalla en 1948 con Una vida marcada, de Robert Siodmak, película de gansters considerada una de las obras cumbres del género. Lo hacía en el papel de una linda adolescente italoamericana.
  • Curiosamente, en su siguiente película, Odio entre hermanos (1949) de Joseph L. Mankiewizk, hace un papel casi idéntico en otra de las obras cumbres del director de Cleopatra.

  • Pero en 1950, ya con 17 añitos, los productores consideran que está preparada para lucir sus encantos y encandilar al público masculino.

  • Siempre flanqueada por la omnipresente presencia y administración materna, acepta (acepta mamá que interprete) el papel de india en el western Flecha rota., dirigido por Delmer Daves.
  • Considerado el primer western que se posiciona de parte de los indios y su causa, interviene junto a James Stewart, que inicia su sólida y abundante participación en el género, y junto a Jeff Chandler que aquí interpreta al jefe apache Cochise, personaje histórico que repetiría en más de una ocasión.
  • Su siguiente trabajo es una película de piratas, La mujer pirata (1951) de Jacques Tourneur. La mujer pirata era una hiperactiva e imposiblemente masculinizada Jean Peters.
  • Ella, la novia de un bucanero, tendrá que competir con la Peters y con el repentino interés de la señorita pirata por los hombres al enamorarse de su chico.

  • La belleza de Debra Paget, adecuadísima para encarnar a las féminas de las más diversas etnias, le sirve para que, ese mismo año, sea Delmer Daves el que la elija para trabajar con él otra vez en una nueva versión de Ave del Paraíso, un clásico del año 1932 dirigido por King Vidor e interpretado por la mexicana Dolores del Río.

  • Aquí es una bellísima nativa de una isla perdida en los mares del sur donde una erupción volcánica la lleva a los brazos de un aventurero interpretado por Louis Jourdan, por entonces considerado según una encuesta entre las féminas americanas el paradigma de la belleza masculina.
  • De nuevo trabaja junto Jeff Chandler, que también hace de nativo, y que se interpondrá entre ambos para impedir que sus amores interraciales con el apuesto extranjero lleguen a buen puerto.

  • La película fue un enorme éxito gracias a los espectaculares paisajes, al technicolor y a la generosa exhibición de belleza física desplegada por ambos sexos.
  • Por supuesto, Debra Paget acaparó todas las miradas: la de los hombres, que la desearon, y la de las mujeres, que envidiaron su belleza, queriendo vivir sus exóticas aventuras en la pantalla.

  • El cinemascope y el technicolor de los años cincuenta vieron en ella, como en tantas otras bellezas de su estilo, filón para llenar de sensualidad el enorme rectángulo recién inventado que se abría frente a las plateas.
  • Le toca pasar por producciones en la que tenía que lucir su palmito y sus deslumbrantes ojos verdes en primerísimos planos, y poco más, en Bellezas por casar, Los miserables, El príncipe Valiente, Demetrius y los gladiadores, hasta llegar a otro de sus papeles emblemáticos.

En 1955 es elegida por Cecil B. De Mille para encarnar a a la dulce Lilia, con la que cautivó a todo tipo de públicos, en el espectacular remake de Lo Diez Mandamientos, historia que el propio De Mille ya había filmado en 1923.


Con 22 años ha llegado al cénit de su belleza, pero sus siguientes películas no son grandes éxitos. Requerida antes por su físico y su fotogenia que por sus cualidades interpretativas, interviene en Al borde del río (1957) de Allan Dawn, con Ray Milland y Antony Quinn.


Se trata de un western en el que es la esposa del primero, un atrador de bancos. El conflicto se crea al enamorarse de ella el guía al que han contratado para huir de México tras un atraco, El guía es Anthony Quinn.


Al año siguiente interviene en una extrañísima versión de la novela de Julio Verne De la tierra a la luna, ambientada en la Guerra de Secesión, dirigida por Byron Haskin.


En De la tierra a la luna Joseph Cotten es el tripulante de un cohete con destino a la luna que es propulsado por una fuente de energía inventada por un científico algo loco, que le acompaña en el viaje (George Sanders) junto a su bella hija. Por supuesto, la hija no es otra que Debra Paget.


En 1959 vuelve con fuerza al imaginario erótico de medio mundo con las espléndidas y espectaculares cintas de aventuras El tigre de Esnapur y La tumba india, de las que ya hemos hablado en el blog (pinchar enlace) , un díptico dirigido por el gran Fritz Lang, con el que el director de Metrópolis dijo adiós al cine para siempre. En estas películas interpreta dos sensuales danzas indúes que dejaron sin habla al público masculino.


A ella le quedaba muy poco para tomar la misma decisión ya que después de rodar en 1962 El palacio de los espíritus, una película de la serie sobre Edgar Allan Poe que llevaba a cabo por entonces Roger Corman. Tras finalizar el rodaje de esta película, Debra Paget se retiró del cine.


Tenía veintinueve años y, ya liberada de la influencia materna, decidió dedicarse a su verdadera vocación, la de esposa. En 1964 se casó con un magnate del petróleo al que se dedicó en cuerpo y alma a plancharle las camisas y ponerle las pantuflas cuando llegaba a casa.


Antes, en 1958, había estado casada con el actor David Street, en una unión que duró menos de un año, y con el el director de cine Budd Boetticher con el que contrajo matrimonio en 1960. Sólo se mantuvieron juntos un mes escaso.


En la actualidad vive en Houston y sólo se ha prestado a ponerse ante las cámaras para alguna que otra esporádica entrevista en la televisión.

21 comentarios:

  1. Vaya Scotty, una chica preciosa. La fotografía cuarta y sexta son las que másme gustan. Cambió mucho a lo largo de su vida como actriz pero siempre guardaba algo de inocencia. No la recordaba pero al leer los títulos ya he caído en la cuenta de quién era. Un saludo y feliz año nuevo.

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  2. Uno de mis mitos. Cada vez que veo la secuencia del baile en La Tumba India se me cae la mandíbula al suelo.

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  3. Que acierto poner a esta preciosa mujer,es de esas actrices que a pesar de ser una actriz del monton su belleza la encumbraba un poco mas.
    Para mi como a Marcos Callau me gusta la foto 6.
    Buen post

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  4. A mí no me parece tan guapa, pero buen post para repasar su carrera.

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  5. La desconocia bastante, gracias por el post!
    feliz año nuevo!

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  6. Muy poca gente sabe que esa primera fotografía sirvió como modelo para uno de los dibujos mas clásicos en tablas de surf long board vintage hawaianas a finales de los 50. En principio el modelo de dibujo se obtuvo de un tatuaje para marineros en Pearl, pero su procedencia por trazos, pose y caracterísitcas físicas de la fémina provenía de esa fotografía. Que el tatuador utilizó como modelo, y que luego sirvió también para decorar long boards por la parte trasera.

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  7. Por cierto que los reyes os traigan muchas cosas, aunque es un dçia delicado para mi jajaja.

    http://www.youtube.com/watch?v=sjoePzwvAtA&feature=related

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  8. He visto alguna de las películas en las que interviene pero nunca la he tenido por una buena actriz. Más bien la he visto siempre como un cromo coloreado. Tendré que revisarla.

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  9. Hola!. Gracias a todos por comentar.

    Por motivos ajenos a mi voluntad esta semana el blog lo he tenido algo desatendido. Espero poder retomar los tres posts habituales de cada siete días.

    Feliz año, de nuevo...

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  10. Wow, de verdad que ha sido una actriz muy muy bella. La recuerdo especialmente por Los 10 mandamientos...
    Gran entrada, y gran recopilacion.

    Saludos!

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  11. Yo no la tenía por una actriz demasiado guapa hasta que la vi en las de Fritz Lang, que casi me desmayo. Por cierto, vaya comienzo: Siodmak y Mankiewicz, no todos pueden decir lo mismo.

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  12. ¡Maravillosa! Scotty. Siempre la recordaré por 'Flecha rota', y sobre todo también por 'El tigre de Singapur'y 'La tumba india'.

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  13. Preciosa mujer, talentosa artista de cine, buena bailarina que seguramente merecio tener un solo matrimonio y muy feliz.
    Mal aprovechada por los estudios de Hollywood, una vez solucionada su situación económica buscó la tranquilidad del retiro

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  14. El Mago dijo...
    Gracias Scotty, por brindarnos esas fotos y comentarios de esa portentosa belleza que tenía la rara cualidad de la inocencia y sensualidad en combinación perfecta que la hicieron el sueño de tantos de nosotros.

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  15. Hola, amigo Mago.
    Bienvenido al blog y al club de anamorados de esta actriz que derramaba sensualidad pese a su innato candor. Una mezcla realmente excitante.

    Saludos...

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  16. Hay que rico pa todos los que se la comieron por que estaba de madres.

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  17. IMpresionante en la tumba del indio, una belleza nada que envidiar a la Taylor.

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  18. La acabo de ver en El Palacio de los Espíritus, con Vincent Price, y esta señora es FASNTASTICA y de una belleza extraordinaria, de las mujeres más bellas que he visto jamás, y son unas cuantas.

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  19. Me imagino al público masculino viendo en las salas de cine de la ëpoca El tigre de Eschnapur y la tumba india... La Taylor no era la más guapa.

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  20. Debra Paget era una actriz de grand talento.

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